
La mayoría de opciones de alojamiento tienen dos tipos de niveles: gratuito y pagado. El alojamiento gratuito es ideal para quienes están actualmente construyendo su sitio web o quienes solo desean probar un servicio de alojamiento antes de tomar una decisión definitiva. Generalmente, muchas de las características están disponibles pero con una capacidad limitada. Por ejemplo, características como la velocidad del servidor, el espacio en disco, el tráfico mensual y el tamaño de archivo podrían estar limitadas a una cierta cantidad. También algunas características, como la contraseña y la protección antivirus no están disponibles en un servicio de alojamiento gratuito. Por lo tanto, siempre tiene la posibilidad de optar por un alojamiento pagado. Normalmente, las personas que utilizan un servicio de alojamiento gratuito pueden optar por el plan pagado sin perder su información si se quedan con la misma compañía.